Brasil volvió a devaluar el real. Por primera vez el dólar en Brasil superó los 4,40 reales. En lo que va del año, el real se devaluó casi 10%.
¿Por qué esto tiene importancia para la Argentina o Córdoba? Bueno, porque cuánto más se devalúa el real, más difícil es exportar a ese país para las empresas argentinas. Eso afecta sobre todo para la industria manufacturera, para la que Brasil es tal vez el único mercado de importancia al que logra venderle.
Como Argentina necesita dólares en forma desesperada y no tiene crédito, entonces el mercado de Brasil es más vital que nunca. Además, ante la recesión interna, Brasil es una alternativa para vender.
En cambio, de este lado, el peso se ha devaluado mucho y el dólar se ha encarecido para nosotros si lo queremos comprar en el mercado paralelo, en el Blue. Pero para los exportadores el dólar argentina va quedando barato. Porque mientras la inflación adentro sigue, el dólar que cobran los exportadores hace de agosto que sigue fluctuando alrededor los 60 pesos.
El comercio lo siente. En diciembre el saldo comercial fue a favor de la Argentina, pero no llegó siquiera a 200 millones de dólares.
Otro factor clave: en Brasil la inflación es casi nula, así que cuando el real se devalúa los costos en dólares de las empresas bajan y quedan bajos por mucho tiempo. No es como en Argentina.
Para colmo, Brasil está en un claro sendero de reformas. El gobierno de Jair Bolsonaro está desregulando la economía y reduciendo el déficit fiscal (con fuerte reforma previsional) para reducir impuestos a las empresas. Y encima de todo, está el crédito, que es mucho más barato para las empresas brasileñas. La tasa de interés de referencia en Brasil está en 4,25%, mientras la argentina, tras una fuerte baja del Banco Central, está en 40%, casi 10 veces más.
Así es muy difícil para los exportadores argentinos vender algo, incluso a Brasil.
