Menú
×
Cadena 3

La otra mirada

Fin de una era: la Anses ya no es el ente de los jubilados

Tiene 28 millones de beneficiarios. Apenas 2 millones son jubilados que trabajaron y aportaron. Y la nueva ley de movilidad podará haberes como si fueran un subsidio planero.

29/12/2020 | 08:33

Hoy el kirchnerismo se apresta transformar en ley la nueva fórmula de movilidad de las jubilaciones.

Con lo cual, podríamos decir, se termina una era: la Anses va dejando de ser el tradicional ente de los jubilados.

Me baso en dos cosas. Primero, ayer la propia Anses divulgó, con orgullo, que este año el organismo le pagó algo, le firmó un cheque al 62% de los argentinos. Son 28 millones de personas. ¿Sabés cuántos de todos esos son jubilados reales, que trabajaron y que aportaron? Dos millones de personas. Es decir que menos del 8% de los clientes de la Anses son sus clientes originales, son los que pusieron la plata. O sea que, desde ese punto de vista, los jubilados-jubilados, genuinos, son ya una minoría marginal. La gran mayoría del dinero que maneja la Anses no va a a ellos sino a una infinidad de beneficiarios, algunos con más justificación que otros para recibir subsidios, pero por cierto, tornando todo esto infinanciable. No sé si hay otro país que pretenda subsidiar al 62% de la población. ¿Quién queda para trabajar y pagar el subsidio? Cada vez menos gente.

Pero, en segundo lugar, me baso en otro elemento para decir que se termina una era. Es que hoy, cuando se sancione la ley de movilidad, los dos millones de jubilados que trabajaron y que aportaron, van a transformarse, en los hechos, en algo parecido a planeros. Porque sus haberes van a sufrir una nueva poda, igual a la que afectará a los otros 26 millones de personas que subsidia Anses y que nunca aportaron nada.

La poda es doble. Si la ley sale como llegó del Senado, dice el especialista Alejandro Chiti, el gobierno les va a “comer” otro trimestre más de ajuste, porque el aumento que supuestamente debería corresponder al período julio-agosto-septiembre de este año va a quedar en el limbo. Ese trimestre la inflación fue de 7,4%.

Y, por otro lado, como ya se sabe, las jubilaciones van a quedar desconectadas de la inflación y atadas a los salarios y la recaudación de Anses. Eso garantiza que, en lo próximos meses, los haberes van a sufrir pérdidas, porque es seguro que la inflación va a ser alta, que los salarios la van a correr por atrás y que es difícil que el empleo en blanco crezca. Más adelante, esas condiciones pueden llegar a cambiar, si toda la economía argentina mejora. Pero, primero, habrá un guadañazo.

Y los jubilados que durante su vida activa trabajaron son los que pagarán la fiestita del país en el que cada vez menos gente trabaja.

Audios

El FMI y EEUU: de diablos a corderitos en un finde

Los inversores se hacen los osos

Los inversores se hacen los osos

Te puede Interesar

Lo Último